lunes, 5 de julio de 2010

La chica de la mecha roja


La chica de la mecha roja apareció desde un lado como una bruma aparece en la mar,tan efimera,tan real,tan especial,tan normal, y desde sus ojos consegui verme,el reflejo de la propia mente (luego pensé) pues la chica de la mecha roja a querido volver.
Ella se acercó de forma sugerente,con su tenebrosidad en las manos,toda vestida de noche,salvo por su mecha roja,que la hacía radiar,daba una sensación de fugocidad,se hacia desear,y mientras su oscuridad se me impregnaba en la cabeza,yo impaciente miraba como el sonido de sus pisadas rompian con certeza mi serenidad,claro de luna se oía en el ambiente,salia desde sus cascos un sonido diligente que acompañaba su paseo,ella pasó por mi lado,me dedico una mirada,profunda,y desde entonces recorde por que era su esclavo,y sin siquiera pensarlo la seguí,desde cerca,mis manos se acercaban con sutileza,intentando que fuera lo más suave posible,que me recordara siempre por ser asi de simple,por no esperar a decir nada,yo querría recordarla así,siempre muda,siempre feliz,y cuando por fin consegui tocarla,alcanzarla,me rendí,ella se giro y sus ojos me acuchillaron con escozor en todo el cuerpo,tu tacto era frío,sus manos sueves y blancas,su mecha roja con la luz brillaba,y a punto de besarla estaba cuando sus labios carmin desaparecieron,me habia despertado,y estaba en mi cama.

2 comentarios:

  1. "entonces recorde por que era su esclavo,y sin siquiera pensarlo la seguí"
    Me encantó.
    A veces los sueños son mejores que la realidad.
    Un muaá de uva

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